El uso del disfraz en el contexto decimonónico jugaba un rol importante en el ámbito de la recreación social, heredado de prácticas sociales muy anteriores que con el desarrollo de la fotografía se diversifica, encontrando nuevas posibilidades, como la de “visibilizar” o la de “mostrar” ciertos aspectos que dan realce o atractivo al individuo, o hacen aparecer aspectos sorprendentes o interesantes de su fisonomía o personalidad.
(Serie elaborada por Nicole Iroumé)